Esta es la escapada perfecta para los amantes de las picadas y el buen comer

Esta es la escapada perfecta para los amantes de las picadas y el buen comer
Para quienes disfrutan de los sabores regionales y el turismo gastronómico, existen Escapadas ideales que combinan paisajes serranos, aire puro y el placer del buen comer. En esta localidad bonaerense, la cultura de las picadas es casi una tradición, y cada rincón invita a degustar sus productos artesanales.

Con opciones para todos los gustos (desde visitas a fábricas hasta bares y almacenes típicos), este destino se consolida como un punto de encuentro para quienes buscan desconectar de la rutina y reencontrarse con el placer de la comida bien hecha.

CÓMO ES LA ESCAPADA IDEAL PARA LOS AMANTES DEL SALAME Y LA COMIDA

Tandil, un destino que combina paisajes naturales, historia y una gastronomía distintiva, se ha consolidado como uno de los lugares más atractivos de la provincia de Buenos Aires.

Entre sus celebraciones más reconocidas se encuentra la Fiesta del Salame Más Largo del Mundo, un evento que no solo atrae a miles de visitantes cada año, sino que también ha convertido a la ciudad en un ícono del turismo gastronómico argentino. Cada noviembre, durante el festival, Tandil busca batir su propio récord en la elaboración del salame más extenso, reforzando su identidad como cuna de tradición, sabor y cultura local.

Esta festividad va más allá de un simple concurso: representa una celebración de la calidad artesanal y del legado culinario. Tandil fue la primera ciudad del país en recibir la Denominación de Origen (D.O.) para su salame, un sello que garantiza la autenticidad y excelencia del producto. De esta manera, el evento se transforma en un homenaje a los productores locales y a una tradición que trasciende generaciones.

Durante la fiesta, los visitantes pueden disfrutar de una verdadera experiencia gastronómica, con los clásicos fogones tandilenses como protagonistas. Allí se preparan especialidades como chorizos, bondiolas, porker, pechito de cerdo y matambre, junto a acompañamientos típicos como papas fritas en grasa de cerdo y empanadas caseras. Todo esto en un ambiente festivo que combina buena comida, música y la calidez característica de Tandil, haciendo del evento una cita imperdible para los amantes de la carne y las tradiciones argentinas.