Cómo saber si una persona es agresiva en pocos minutos según la psicología

Cómo saber si una persona es agresiva en pocos minutos según la psicología
Detectar señales de agresividad en una persona puede ser clave para anticipar conflictos y manejar mejor las interacciones cotidianas. La psicología moderna y estudios en salud y conducta se enfocan cada vez más en identificar patrones de comportamiento que permitan reconocer estas actitudes en cuestión de minutos, especialmente en contextos donde se requieren respuestas rápidas y efectivas.

Los especialistas destacan que ciertos indicadores pueden aparecer de manera sutil, incluso antes de que se exprese una reacción evidente. Estas primeras señales, si se comprenden a tiempo, ayudan a interpretar el estado emocional de alguien y a prevenir situaciones incómodas o tensas. Por eso, cada vez más estudios se centran en cuáles son esos rasgos que cualquier persona puede observar sin necesidad de formación profesional.

CÓMO DESCUBRIR SI UNA PERSONA ES AGRESIVA SEGÚN LA PSICOLOGÍA

Los expertos en comunicación no verbal señalan que la primera señal de agresividad encubierta aparece cuando lo que alguien dice no coincide con su lenguaje corporal. Según explican, estas personas suelen hablar con calma, pero dejan entrever tensión en sus expresiones o en la mirada.

Aunque sus palabras puedan sonar cordiales, suelen incluir ironías, dobles sentidos o insinuaciones diseñadas para generar malestar emocional. En cuanto al comportamiento corporal, suelen evitar el contacto visual, adoptar posturas cerradas o mostrar sonrisas rígidas que reflejan incomodidad o resistencia.

Una investigación publicada en Frontiers in Psychology en 2022 indica que quienes presentan tendencias pasivo-agresivas suelen usar formas de comunicación indirecta para expresar hostilidad sin dejar de preservar una apariencia socialmente aceptada, lo que puede generar confusión y estrés en quienes interactúan con ellos. Entre sus estrategias más habituales se encuentran los comentarios vagos y el uso del sarcasmo, un recurso que les permite atacar sin hacerlo explícito, resguardándose detrás de frases como “era solo un chiste”.

La psicóloga Judith P. Andersen, de la Universidad de Toronto, advierte que este tipo de humor, aunque parezca inocente, activa en el cerebro respuestas similares a las que se producen ante una amenaza directa, generando un estado de alerta constante. Por eso, identificar este tipo de agresión sutil requiere prestar atención tanto a lo que se dice como a las señales emocionales y conductuales que lo acompañan.