Esta escapada a solo 1 hora de Rosario tiene cascadas únicas y un paisaje inolvidable: cuál es

Esta escapada a solo 1 hora de Rosario tiene cascadas únicas y un paisaje inolvidable: cuál es
A pocos kilómetros de Rosario, existe un destino que sorprende por su belleza natural y su cercanía. Ideal para Escapadas de fin de semana, este rincón combina la serenidad del entorno con la fuerza del agua en movimiento. Sus cascadas, escondidas entre formaciones rocosas y vegetación autóctona, ofrecen un espectáculo que invita a desconectarse.

El recorrido hacia este lugar ya es parte de la experiencia: caminos rurales, senderos y miradores permiten contemplar la diversidad del paisaje santafesino, que muchas veces pasa desapercibida. Perfecta para quienes buscan una aventura cercana sin alejarse demasiado de la ciudad, esta escapada promete un paisaje que parece sacado de otra provincia.

CUÁL ES LA ESCAPADA SANTAFESINA A UN PAISAJE CON CASCADAS ÚNICAS

A tan solo una hora de Rosario, Coronda se perfila como una de las escapadas más encantadoras para el verano 2026.

Este pintoresco pueblo santafesino, famoso por sus frutillas, combina historia, naturaleza y gastronomía en una propuesta accesible y atractiva. Su Casco histórico, que refleja más de 350 años de vida comunitaria, convive con una ruta gastronómica diversa que invita a recorrer bares y restaurantes ideales para disfrutar tanto de día como de noche.

Uno de los mayores atractivos naturales del lugar es el arroyo Colastiné, conocido por sus pequeñas cascadas que le valen a Coronda el apodo de “Iguazú santafesino”. Esta corriente desemboca en el río Coronda, un brazo del Paraná con una costanera pintoresca donde se puede caminar, descansar o disfrutar del atardecer junto al agua.

Su entorno sereno y su cercanía a la ciudad lo convierten en un destino perfecto para quienes buscan una escapada corta pero con múltiples opciones de disfrute.

Además, Coronda es reconocida como la capital nacional de la frutilla. Cada año celebra su tradicional Fiesta Nacional de la Frutilla, un evento que rinde homenaje a la producción local de más de siete millones de kilos anuales, equivalente al 45% del total nacional. Por eso, visitar este pueblo sin probar sus frutillas frescas o los productos elaborados con ellas sería casi un pecado turístico: un sabor que resume la identidad y el orgullo corondino.