Historia en Perú: madre e hija se enfrentaron en la liga de voley

Historia en Perú: madre e hija se enfrentaron en la liga de voley
El deporte suele regalarnos instantes que quedan grabados en la memoria. Uno de esos episodios se vivió el pasado fin de semana, durante la tercera fecha de la Liga Peruana de Voley.

En el Polideportivo de Villa El Salvador se midieron Rebaza Acosta y Géminis, en un encuentro que tuvo un condimento especial: Andrea Ampuero y su hija Brenda Quiroz Ampuero estuvieron frente a frente en la cancha.

CUÁL ES LA HISTORIA DE LA MADRE E HIJA QUE JUGARON ENFRENTADAS EN LA LIGA DE VOLEY DE PERÚ

En el enfrentamiento entre Rebaza Acosta y Deportivo Géminis, todas las miradas se posaron en dos protagonistas unidas por un lazo único: Andrea Ampuero y su hija Brenda Quiroz Ampuero. El azar las colocó en lados opuestos de la cancha, pero la relación maternal siguió intacta. Aunque defendieron camisetas diferentes, ambas desplegaron su talento y pasión por el vóley, en un choque donde el amor familiar se mezcló con la competitividad deportiva.

Al concluir el partido, madre e hija se abrazaron con emoción, regalando una postal que conmovió a los presentes. Ese gesto reflejó la verdadera esencia del deporte: rivalidad dentro del campo, pero respeto y cariño fuera de él. Relatos como este engrandecen a la Liga Peruana de Voley y sirven de inspiración a las nuevas generaciones, demostrando que el deporte también puede ser una lección de vida sobre unidad y valores familiares.

Para Andrea, con casi 37 años, el encuentro significó mucho más que un partido. No solo fue parte de otro desafío con Rebaza Acosta, sino que además vivió un momento que anhelaba desde hacía tiempo: ver a su hija debutar como profesional. En el tercer set, Brenda recibió la confianza de su técnico y entró a la cancha con la camiseta de Géminis para ejecutar un servicio, cumpliendo así su sueño.

“Me hubiese encantado que pudiéramos compartir equipo, pero no se dio. Igual estoy feliz, cuando la vi entrar me puse nerviosa, sentí mucha emoción (…) Estábamos ansiosas, no solo nosotras, también su hermano y toda la familia. Ayer entré a su cuarto y le dije: ‘si te toca jugar, entregá todo y que gane el mejor’”, confesó emocionada Andrea, referente del Rebaza Acosta.

Por su lado, Brenda vivió con entusiasmo su primera experiencia en la Liga Peruana de Vóley y reconoció que soñaba con hacerle un punto a su madre. “Estoy muy contenta por el debut. La verdad, quería marcarle porque me mandaron a dirigirle el saque, pero no se dio. Seguiré trabajando para tener más minutos y ojalá poder ganarle”, expresó entre risas la joven jugadora.