Physical Address
304 North Cardinal St.
Dorchester Center, MA 02124
Physical Address
304 North Cardinal St.
Dorchester Center, MA 02124
Este comportamiento psicológico está vinculado al miedo a ser juzgado como una persona egoísta o poco solidaria, lo que frecuentemente conduce a aceptar compromisos no deseados con tal de evitar el conflicto o el rechazo.
CUÁL ES EL SIGNIFICADO DE PEDIR DISCULPAS DESPUÉS DE DECIR QUE NO SEGÚN LA PSICOLOGÍA
La dificultad para poner límites claros tiene un vínculo profundo con el desarrollo emocional y la salud psíquica. Desde temprana edad, muchas personas aprenden que complacer a los demás es algo positivo, mientras que negarse se interpreta como una conducta inadecuada. Esta forma de educación deja huellas en la vida adulta, donde pronunciar un simple “no” puede transformarse en un reto emocional y psicológico.
El médico psicoanalista Juan Eduardo Tesone señala que la capacidad de decir “no” comienza a formarse desde los primeros años de vida: “Alrededor de los dos años, el niño descubre esta palabra como una herramienta para afirmar su individualidad”, explica. Sin embargo, en la adultez, muchas personas enfrentan obstáculos para ejercer este derecho básico de autodeterminación.
Tesone también subraya que el temor a contradecir a los demás puede tener distintos orígenes: “Surge del miedo a perder vínculos, de la tendencia a someterse ante las demandas ajenas o de considerar el ‘no’ como una forma de agresión”. Esta última percepción resulta clave, ya que muchas personas confunden el rechazo con violencia, cuando en realidad expresar un límite es una manifestación de libertad personal.
Por su parte, la psicoanalista Mirta Noemí Cohen ofrece una mirada complementaria: “Decir ‘no’ implica ejercer la función paterna, es decir, marcar límites que protegen tanto a uno mismo como al otro”. La especialista compara este acto con la protección que un padre brinda a su hijo, al impedirle entrar solo al mar por el riesgo que eso conlleva. En esa línea, establecer límites no es un signo de egoísmo, sino un gesto de cuidado, responsabilidad y salud emocional.
El psicólogo clínico Lucas Vázquez Topssian agrega otra perspectiva: “Quienes no logran decir ‘no’ suelen quedar atrapados en las exigencias ajenas”. Estas personas buscan validación a través de ser útiles o indispensables, pero esa necesidad puede comprometer su bienestar psicológico. Según el especialista, “la culpa aparece cuando no se cumplen las expectativas, propias o ajenas, generando malestar y autocrítica constante”.
En coincidencia, los expertos señalan que la culpa es una emoción compleja que puede tener un efecto constructivo o dañino según su intensidad. En niveles saludables, favorece la responsabilidad y la reparación, pero cuando se vuelve excesiva, se transforma en una fuente de angustia que impulsa a actuar en contra de los propios deseos y necesidades.