Argentina cae en el ranking de "calidad de elites"

Argentina cayó 16 puestos en un ranking global sobre el aporte social de las elites al desarrollo nacional. Pasó del puesto 70 al 86 en un listado de 151 países que son analizados por la Universidad de Saint Gallen, de Suiza. Para definir una “elite saludable” se tienen en cuenta dos grandes dimensiones: la influencia política y la creación de valor. Y para un país de ingresos medios o bajos, es un buen predictor del potencial crecimiento económico. Singapur ocupa el primer puesto, seguido por Estados Unidos y Suiza descendió al tercer lugar.

El Índice de Calidad de Élites (Elite Quality Index, EQx) que elabora la Universidad de Saint Gallen es un indicador comparativo de economía política que evalúa cómo los modelos de negocios dominantes en cada país (sus “élites”) crean o, por el contrario, extraen valor de la sociedad. Para 151 países con datos actualizados anualmente, el índice mide la capacidad que tienen sus élites (empresas grandes, instituciones financieras, sindicatos, altos cargos públicos, etc.) de generar un valor sostenible –vinculado al crecimiento y bienestar compartido- en lugar de obtener ingresos por transferencias o “rent‑seeking”.

Las principales dimensiones del índice son: el poder de las élites (“Power”), que mide el grado de concentración de la influencia económica y política; y el valor creado (“Value”), que es la contribución efectiva al crecimiento, la innovación, el empleo y la redistribución social de las elites dominantes. Cada una de estas dimensiones se desglosa en varios subíndices e indicadores (en total más de 140), que abarcan desde la productividad de las inversiones hasta la calidad institucional y la participación ciudadana. La calificación de Argentina en el EQx2025 fue más baja en cuanto al Value creado (quedó en el puesto 124 de los 151) que en relación a la concentración de poder o Power (puesto 45). En este sentido el informe cuestiona que se hayan “priorizado políticas de muy corto plazo impuestas por la hegemonía de turno en detrimento de cuestiones estratégicas consensuadas”.

Estancamiento hegemónico

Específicamente la pregunta que se hace el EQx2025 en su reporte sobre Argentina es qué tan sostenible es el ciclo rotatorio de la circulación de la élite en el país. El informe menciona un "estancamiento hegemónico", al referirse a la lucha entre dos grupos hegemónicos con visiones antagónicas para el desarrollo del país que se alternan en el poder sin tiempo suficiente para implementar su visión de manera duradera y con resultados efectivos. 

Respecto del nuevo sesgo ideológico del Gobierno de turno expresa: “Estos cambios radicales de rumbo se han convertido en una constante en el desarrollo argentino; las élites en el poder imponen y priorizan políticas a corto plazo en detrimento de un plan estratégico a largo plazo acordado para la nación”.

El carácter “extractivo” de la élite argentina es evidente en el EQx2025, que muestra que la riqueza está ahora concentrada en menos manos que en 2024. La concentración de la riqueza durante 2025 se expresa en el colapso completo de la clasificación para el coeficiente de GINI para una tasa de crecimiento de los últimos tres años (Argentina ocupa el puesto 139 versus el 22 en 2024) y el Pilar de Dominio Firme (cayendo del puesto 20 en 2024 al puesto 56 en 2025). 

Otro indicador clave para evaluar la calidad de una democracia, el acceso a la información a través de la libertad de prensa (para el cual Argentina ocupa el puesto 54) muestra un descenso notable en comparación con el EQx2024 (cuando ocupaba el puesto 31).

“La élite argentina tampoco está ejerciendo su influencia para crear suficientes empleos para sus ciudadanos, especialmente para los jóvenes con mayor nivel educativo, quienes optan por desarrollar carreras profesionales en países que ofrecen mejores oportunidades”, relata el reporte. Esto se observa en el indicador de éxodo humano y fuga de cerebros, que se mantuvo bajo en 2025 (puesto 23 en comparación con el 27 el año pasado) y en la tasa de desempleo juvenil (Argentina ocupa el puesto 107).

“La dirección económica general del Gobierno argentino es muy incierta, ya que intenta estabilizar las finanzas públicas en un año de elecciones legislativas de mitad de mandato. Esto genera numerosas tensiones en la sociedad, una situación típica de un estancamiento hegemónico. Estas tensiones ya comienzan a manifestarse, con la Confederación General del Trabajo convocando a una huelga general”, describe el informe.

En síntesis, el descenso en la clasificación EQx2025 de Argentina en comparación con 2024 refleja los numerosos desafíos que enfrenta el país. El crecimiento económico acompañado de una mejor distribución del ingreso no se alcanzará en el corto plazo, así como tampoco una mejora en la calidad y cantidad de empleo, especialmente para los segmentos más jóvenes de la sociedad.