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Donald Trump encara su segunda presidencia en Estados Unidos.
Donald Trump volverá a la Casa Blanca. Para millones de estadounidenses, quedaron desplazados en el orden de prioridades la toma del Capitolio de inicios de 2021 y otros asuntos de agenda que fueron agitados por Kamala Harris y el Partido Demócrata para intentar continuar en el poder.
La absoluta ineficacia de Joe Biden para gestionar la economía de la primera potencia mundial (recordemos que llegó a niveles de inflación poco usuales en la historia del país), sumado a otros temas como la crisis en las fronteras que vive Estados Unidos, fueron demasiado para muchos y el hoy amo y señor del Partido Republicano (lugar que supo construir en los últimos cuatro años) tendrá un nuevo período de gobierno en Washington.
La próxima presidencia de Trump, según Trump: inmigración, aborto, el mundo y la economía
En una entrevista con Time a fines de abril, Trump adelantó algunas de las políticas que podría implementar en una segunda presidencia. Uno de los temas prioritarios fue la inmigración desde el sur del país, donde no descartó la posibilidad de construir campos de detención para migrantes que ingresen de forma ilegal. “No descartaría nada”, afirmó Trump. Sin embargo, aclaró: “No habría tanta necesidad de esos campos” porque, según su plan, los migrantes serían deportados rápidamente a sus países de origen. “No los estaríamos dejando en el país”, subrayó.
Sobre el aborto, al ser consultado sobre si le parecía aceptable que los estados castigaran a las mujeres que accedieran a abortos tras una prohibición específica, respondió: “No tengo que estar cómodo o incómodo. Los estados van a tomar esa decisión. Y son los estados los que van a tener que estar cómodos o incómodos, no yo”.
En cuanto a posibles conflictos internacionales, Trump declaró que, en caso de guerra entre Israel e Irán, “protegerá a Israel”. No obstante, sobre Ucrania, indicó que “intentará ayudar a Ucrania, pero Europa también tiene que estar allí y hacer su trabajo”. Trump también fue claro respecto a su enfoque económico: en la entrevista, expresó su intención de implementar nuevas medidas proteccionistas para los fabricantes estadounidenses. Mencionó la introducción de aranceles de “más del 10%” y la creación de “un impuesto recíproco”.
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