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El presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, tendría previsto designar al senador ultraconservador de origen cubano Marco Rubio como jefe de la diplomacia de ese país. Así lo adelantó este martes el diario The New York Times.
Rubio es un congresista por el estado de Florida, de línea dura, pero gran conocedor de los temas internacionales. De confirmarse su designación Rubio se convertiría en el primer latino en ocupar el cargo. Se daría además en momentos en que el voto latino al candidato republicano alcanzó un nuevo récord.
El de Rubio, vicepresidente del Comité de Inteligencia del Senado, fue uno de los nombres que se barajaron en su momento como posible compañero de fórmula de Trump antes de que finalmente este se decantara por J.D. Vance.
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Marco Rubio y Javier Milei
El diario neoyorquino, que cita a tres fuentes, precisó sin embargo que Trump "todavía podría cambiar de opinión en el último momento".
El senador de 53 años y Trump fueron rivales en las primarias republicanas en 2016. Por aquel entonces la relación entre ambos era mala y los calificativos despectivos estaban a la orden del día.
Rubio dijo de Trump que tenía las "manos pequeñas" y le llamó "estafador". El magnate también se burlaba de él, con el apodo de "pequeño Marco".
Sin embargo la relación fue mejorando durante el primer mandato presidencial de Trump con quien trabajó sobre temas de América Latina, y fue un gran apoyo en la campaña para volver a la Casa Blanca, sobre todo entre el electorado latino.
Reunión con Javier Milei
Javier Milei recibió a fines de febrero pasado en Casa Rosada a Marco Rubio. El ministro de Economia Luis Caputo y la entonces Canciller Diana Mondino aprovecharon la visita del senador republicano al país y también lo recibieron, de forma separada.
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Su encuentro con Caputo tuvo lugar en el Palacio de Hacienda y coincidieron en destacar el interés a nivel mundial que despertaron las políticas impulsadas por el gobierno libertario. Además, Caputo brindó detalles sobre el plan que pusieron en marcha para ordenar la economía argentina. Ambos hicieron hincapié en las distintas reformas que ya está implementando el Gobierno y se refirieron a la relación bilateral.
En tanto, en su reunión con Mondino, la entonces canciller mencionó los principales desafíos que enfrenta la Argentina y los mecanismos que está adoptando el Gobierno para enfrentarlos. En este sentido, habló sobre eliminar las distorsiones económicas para lograr la estabilidad macroeconómica y una rápida inserción del país en el territorio internacional. Asimismo, se refirió a la “central importancia” que significa la apertura de nuevos mercados para la Argentina.
Al dialogar sobre la situación regional, ambos coincidieron en que es necesario profundizar el trabajo conjunto en foros multilaterales, como la Organización de los Estados Americanos (OEA). Además, destacaron la importancia de reforzar el rol histórico de este foro en la defensa de la democracia y en la promoción y protección de los derechos humanos, como así también en temas de seguridad y desarrollo.
Contra China, Cuba, Venezuela y Nicaragua
En política exterior, Rubio es partidario de ejercer máxima presión sobre China, gran potencia rival de Estados Unidos, e Irán y es favorable a acabar con la guerra entre Ucrania y Rusia.
Critica duramente a Cuba, al mandatario venezolano Nicolás Maduro y al nicaragüense Daniel Ortega.
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