El empate, uno de los resultados posibles (¿y esperables?) entre Donald Trump y Kamala Harris

La elección en los Estados Unidos entre Donald Trump y Kamala Harris es tan ajustada que existe la posibilidad de que igualen en el Colegio Electoral, algo que solamente sucedió en la elección de 1800.

Conviene recordar que en la primera potencia mundial el voto es indirecto. Cada uno de los cincuenta estados otorga una determinada cantidad de electores. En total, el Colegio Electoral tiene 538 miembros y hacen falta 270 para consagrarse. El candidato que se impone en un estado se lleva todos los electores, con lo que en realidad se trata de cincuenta elecciones indirectas.

¿269 electores para cada uno?

Como el número de integrantes del Colegio Electoral es par, y de acuerdo a los estados que gane cada candidato (la cantidad varía según cada estado), cabe la posibilidad de un empate en 269. ¿Qué ocurriría en ese caso?

La Constitución de los Estados Unidos tiene prevista una situación así. Spoiler: no se arroja una moneda al aire ni van a penales. La 12ª enmienda, implantada tras el empate de electores de 1800 entre Thomas Jefferson y John Adams, contempla que el Congreso se hace cargo de la situación. Los representantes (diputados) y senadores asumen el 3 de enero. A la Cámara Baja le toca resolver el nombre del presidente. El Senado se ocupa del vice. Es lo que se llama elección contingente. ¿Cómo se hace?

Una vez que el Colegio Electoral certifica el empate en número de electores, los representantes deben optar entre los tres candidatos más votos para presidente; y los Senadores deben optar entre los dos principales para vice.

Elección contingente

El asunto se complica cuando se aprecia que el voto en la elección contingente no es individual, sino por Estado. es decir, hay un voto por Estado. Veamos: California tiene la misma representación que Idaho en una situación así, siendo que es el estado con más representantes (55) y Idaho tiene apenas dos. 

El partido con más representantes impone su voto en cada estado. Como son 50 estados, alcanza con una mayoría de 26. En el Senado, cada voto cuenta por mismo. Son cien senadores, y se precisa una mayoría de 51. 

Puede suceder que no haya acuerdo tras la votación, prevista para el 6 de enero (día en que se cuentan los votos del Colegio Electoral). Los próximos presidentes y vice deben asumir el 20 de enero, y si no se solucionó la cuestión, toma posesión el vicepresidente electo por el Senado. Como la votación en la Cámara Alta es más ágil que en la de Representantes, eso se solucionaría antes del 20. 

Pero puede pasar que no hubiera un vicepresidente para esa fecha. Entonces se activa la 20ª enmienda, que coloca de momento en la Casa Blanca al presidente de la Cámara de Representantes, a la espera de que se destrabe la votación.

A nivel legislativo, el Senado renueva un tercio de sus cien bancas cada dos años, mientras que la Cámara Baja se renueva por completo (435 escaños) cada dos años. De allí la importancia de quien tenga mayoría parlamentaria si se llegara a dar el escenario del empate en electores.