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“El mapudungun está en peligro de extinción”, alerta Mariana Morán, mujer mapuche y docente de nivel inicial y primario y vicedirectora de la escuela 154 del barrio El Frutillar, en Bariloche. Ante ese panorama, junto a Vanesa Gallardo Llancaqueo, mujer mapuche y profesora de Letras, crearon Mürkantun (editorial Tinkuy), el primer juego comercial en mapudungun para revitalizar el idioma a través de lo lúdico.
Mürkantun (que significa “juego para buscar el par”) consiste en un mazo con 50 cartas ilustradas con un animal o planta con valor cultural y filosófico en el pensamiento mapuche. A cada una le corresponde otra carta con un verbo en infinitivo o una característica que la destaque. Al igual que el Memotest, el objetivo del juego es encontrar el par (mür). Esta opción está pensada para quienes recién se familiarizan con la lengua. En cambio, si los participantes son hablantes avanzados deben describirle características del animal o planta a otro jugador que tendrá que resolver la adivinanza.
“Hay una experticia de la lengua a la hora de construir esas pistas desde la metáfora -explica Gallardo Llancaqueo-. Dentro del pueblo mapuche se valora a la persona que tiene memoria al momento de hablar en público. Importa tanto lo que se dice como la forma en la que se dice”.
La forma de nombrar en mapudungun, continúa la docente y profesora en Letras, está relacionada a “la capacidad de observación y nombrar al otro según lo que trae y sus características”. En Mürkantun, el par de mañke (cóndor) es alüpüra müpün (volar muy alto), mientras que el de kütxi (arrayán) es keluchoz mamüll nien (tronco de color naranja).
Cómo se creó Mürkantun
En 2016, Morán y Gallardo Llancaqueo coordinaban un espacio de aprendizaje de mapudungun en casas de familia. Con un panorama de hablantes mayores que “están partiendo” y que -salvo contadas excepciones- el tema no está incluído en la currícula escolar, ambas remarcaron la importancia de los talleres para la revitalización de la lengua de forma oral y escrita.
“Íbamos creando nuestro propio material didáctico para trabajar y queríamos que fuera agradable para adultos y niños”, contó Gallardo Llancaqueo. Como Morán ya tenía otros juegos de cartas de Tinkuy, se basaron en esos modelos para crear Mürkantun. “Hicimos un juego de cartas piloto que salió de la impresora de casa”, recordó Morán.
Gracias a un librero de Bariloche, las dos conocieron en 2019 a Ariel Marcel y Gloria Claro, encargados de la editorial de juegos literarios, para materializar su idea. “El proceso de creación se dio en tiempos de pandemia. Somos un pueblo estigmatizado en los medios de comunicación y era muy importante para nosotras lograr una propuesta que fuera bella. Somos un pueblo alegre, creativo. Y tuvimos el desafío de, a través de la virtualidad, contar la importancia de cada elemento de las cartas”, explicó la docente de nivel inicial.
La ilustradora brasileña Mónica Bussmann fue la encargada de plasmar esas ideas. Ella ya había hecho trabajos artísticos sobre la flora y la fauna patagónica -hace 20 años que vive en Bariloche- cuando Morán y Gallardo Llancaqueo le acercaron la propuesta de Mürkantun.
“Aunque el objetivo es buscar el par, no son dos pares iguales sino que encontrás la parte (una pluma) y el todo (un pájaro). Eso es algo de la cosmovisión mapuche muy importante que aprendí y que me abrió una ventana al momento de trabajar la ilustración y también un desafío”, dijo a Página|12.
Cada animal, árbol y planta de Mürkantun están creados a partir de recortes de papel hechos por Bussmann. “No dibujo antes, todo lo que se ve es recorte de papel. Los originales los hice en tamaño A5 y les agregué algún detalle pequeño con tinta”, contó.
"Es posible vivir en mapudungun"
La primera edición del juego fue un éxito y se agotó. La segunda se lanzó el 1° de agosto de este año, en el marco del Día de la Pachamama, y el cambio principal es que incluye un glosario en mapudungun y castellano. “Que el juego fuera monolingüe era algo importante para nosotras, por eso las cartas solo están en mapudungun -explicó Gallardo Llancaqueo-. El monolingüismo genera el deseo de conocer la lengua. Y para nosotras es un gesto político. Algunos lingüistas hablan del concepto de lealtad lingüística, que es no dejar sola a la lengua cuando se puede resolver la vida en otro idioma”.
Ambas usan el mapudungun de forma cotidiana. “Un saludo, una palabra, hace que nuestra lengua siga viva y que genere inquietud”, afirmó Morán. Y Gallardo Llancaqueo añadió: “Queremos hacer visible, audible el idioma. Hoy hay hablantes que leemos y escribimos en mapudungun porque es posible vivir en mapudungun”.